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Aston Martin rectifica tras el desastre en Australia: Fernando Alonso sonríe

Cambios urgentes para recuperar el ritmo en China

El debut de Fernando Alonso en la temporada 2025 de Fórmula 1 no pudo haber sido más amargo. En un Gran Premio de Australia para el olvido, el bicampeón mundial terminó contra el muro en la vuelta 34 cuando intentaba defender la décima posición. Un accidente que dejó a Aston Martin sin puntos y encendió las alarmas en Silverstone.

El equipo británico había prometido un coche competitivo para luchar en la zona media-alta de la parrilla, pero la realidad fue bien distinta. Ahora, con la vista puesta en Shanghái, la escudería ha decidido tomar cartas en el asunto y ejecutar ajustes inmediatos en el AMR25 para evitar otro fiasco.

Ajustes técnicos para evitar otro golpe

Andy Cowell, jefe de la escudería británica, ha confirmado que ya trabajan en modificaciones para mejorar el rendimiento del monoplaza. “Estamos haciendo ajustes clave tanto en fiabilidad como en rendimiento. Sabemos lo que falló en Melbourne y estamos decididos a corregirlo”, explicó en una entrevista con Diario AS.

Uno de los aspectos fundamentales será la adaptación a las condiciones del GP de China, donde no se esperan lluvias, pero sí temperaturas frías que pueden afectar la gestión de neumáticos. “Es un trazado exigente, con curvas de alta velocidad y una recta interminable. Tenemos que optimizar la puesta a punto y aprender de lo sucedido en Australia”, añadió Cowell.

Fernando Alonso sonríe

Alonso, autocrítica y un dardo al estado de la pista

Fernando Alonso no dudó en asumir su responsabilidad en el accidente de Australia, pero también dejó claro que las condiciones del asfalto no ayudaron. En la curva 6, perdió el control del AMR25 y se estrelló contra las protecciones, lo que obligó a la salida del Safety Car.

“La pista estaba muy sucia, había grava justo en la curva donde perdí el coche. No hice nada diferente a las vueltas anteriores, pero la adherencia desapareció de repente”, explicó el piloto asturiano. Justo antes de su incidente, Pierre Gasly había pisado la grava, lo que pudo haber dejado restos en la trazada de Alonso.

En el momento del choque, marchaba décimo, aunque reconoció que Antonelli venía con mejor ritmo y que la lucha por los puntos habría sido complicada. “No sé si habría podido mantener la posición, pero fue frustrante terminar así”, admitió.

Con Shanghái a la vuelta de la esquina, Aston Martin tiene la oportunidad de redimirse y demostrar que su monoplaza puede estar a la altura de las expectativas. ¿Será China el punto de inflexión que necesita Alonso para volver a brillar en la parrilla? La respuesta, en unos días.

Fernando Alonso