Aramark y su interés en Barça Vision no es más que un préstamo sobre los rápeles de venta del catering del nuevo Camp Nou
La reciente inversión de Aramark en Barça Vision, valorada en 40 millones de euros, ha generado numerosas especulaciones sobre los verdaderos intereses detrás de esta operación. A simple vista, no parece lógico que una multinacional especializada en catering y restauración se involucre en un proyecto como Barça Vision, pero al profundizar, emerge una estrategia que podría ser clave para el futuro del Espai Barça y, por ende, del FC Barcelona.
El acuerdo alcanzado entre Joan Laporta y Aramark no solo busca resolver los atrasos en la venta de Barça Studios de 2022, sino que también abre la puerta a la obtención de la concesión de la restauración integral del nuevo Espai Barça. La multinacional americana parece haber identificado en este proyecto una oportunidad única para consolidar su presencia en el mercado español, incluso a riesgo de asumir pérdidas significativas durante los primeros años.
Los precedentes y el futuro del FC Barcelona
No es la primera vez que Joan Laporta recurre a esta estrategia financiera para anticipar ingresos. En el verano de 2022, operaciones similares con Orpheus Media y Socios.com revelaron que el presidente del FC Barcelona había prometido pagos futuros que, al no cumplirse, dejaron al club en una situación delicada. La repetición de este esquema con Aramark sugiere que Laporta sigue buscando alternativas para mantener a flote la economía del club a corto plazo, pero los riesgos son cada vez más altos.
El precedente de Libero Football Finance AG, que denunció al Barça por incumplimiento de las promesas de Laporta, es un claro indicativo de que estas maniobras podrían terminar costándole caro tanto al club como a su presidente. En este sentido, la operación con Aramark podría ser la última carta que Laporta juegue antes de que las consecuencias financieras se hagan inevitables.
Aramark, el Espai Barça y la supervivencia del FC Barcelona
La alianza entre Aramark y el FC Barcelona podría ser un paso crucial para asegurar el éxito del Espai Barça y la estabilidad financiera del club, pero también representa un riesgo considerable. Si bien Aramark podría beneficiarse de una concesión que le permitirá liderar el sector de la restauración en el entorno azulgrana, su implicación en la operación de Barça Vision plantea interrogantes sobre la sostenibilidad de este modelo financiero.
Lo que está claro es que el futuro del FC Barcelona, y el de Joan Laporta, dependerá en gran medida del desenlace de esta compleja trama financiera. Sin embargo, la jugada no está exenta de riesgos. La mecánica contable del acuerdo implica que el FC Barcelona no podrá contabilizar la totalidad del ingreso de manera inmediata, sino que deberá hacerlo de forma diferida, repartiendo el importe anual durante las temporadas de explotación pactadas.
