Desde la presidencia culé trabajan en la llegada de varios estelares y hay uno que podría causar bastante impresión
Joan Laporta no se detendrá en el siguiente mercado en la búsqueda de fichajes de calidad para el FC Barcelona y una de las promesas a Xavi tiene que ver con la medular. Y es que esta demarcación quedará bastante expuesta con la salida de Sergio Busquets, quien hará las maletas desde el 30 de junio.
Recordemos que Xavi esperaba que el pivote estuviera por más tiempo, al menos un año, pero esto no será posible, ante ello, Laporta tendrá que moverse rápidamente. Pues bien, aunque se pensó en un momento en el arribo de Martín Zubimendi, es una operación que por su alto costo, es inviable para los culés.
Joan Laporta trabaja en un crack para el relevo de Busquets en el Barcelona: Xavi alucina
De esta forma, se ha podido confirmar que hay un estelar oculto en el que el presidente de los blaugrana ya trabaja. Sin lugar a dudas, de darse esta operación, sería de las bombas de la siguiente ventana de transferencias. Estamos hablando del centrocampista alemán del Bayern Múnich, Joshua Kimmich.
Es uno de los mejores en su demarcación en todo el mundo y su nombre ha empezado a ganar fuerza en la dirigencia blaugrana. El teutón ya había estado en la órbita de los del Camp Nou en el pasado, pero nunca se pudo cerrar su paso a la Ciudad Condal. Ahora, se ha conocido que considera un cambio de aires.
Joshua Kimmich podría ser el fichaje top que harían los culés en verano para sustituir a Busi
A partir de allí es que Joan Laporta ha empezado a trabajar en este movimiento estelar, el cual podría dar bastantes variantes a Xavi. De esta manera, el proyecto culé de cara al 2024 parece ser bastante ambicioso. Esto, ya que se conocen una buena cantidad de nombres de gran calidad.
La versatilidad del considerado mejor centrocampista del planeta, también le permite ser lateral diestro. Esto le ha dado un plus a la hora de ser considerado en la agenda del presidente blaugrana, ya que es otra de las demarcaciones que han dado líos al entrenador. Su valor sería superior a los 45 millones que pagaron por Lewandowski, pero no se acerca a los 60 que piden por Zubimendi.