La cadena alemana de supermercados vuelve a dar el golpe con un producto de máxima demanda en tiempos de pandemia
La pandemia que asola el planeta por culpa del coronavirus ha cambiado radicalmente las costumbres a todos los niveles. Pero aquellos que han sabido adaptarse a las nuevas directrices de la vida, se abren nuevos frentes de negocio. Y eso lo está sabiendo explotar a la perfección la cadena de supermercados Lidl.
Porque a medida que fueron decretando la obligación de las mascarillas y fuimos interiorizando la necesidad de lavarse las manos a todas horas, en Lidl iban lanzando productos que inmediatamente tuvieron éxito y arrasaron en ventas ante la gran demanda.
Ejemplos de éxito fueron las mascarillas de Agatha Ruíz de la Prada, que se agotaron en todos los supermercados de España en apenas un día que estuvieron a la venta. También venden mascarillas desechables y todo tipo de geles hidroalcohólicos.
Por eso la cadena alemana de supermercados está tan bien considerada en los últimos tiempos. Por vender productos de alta demanda, con una parámetros de calidad envidiables y además a unos precios competitivos e imbatibles.
El fenómeno de los termómetros de infrarrojos
Pero sin duda alguna el pelotazo de verdad que ha pegado Lidl ha venido con los termómetros de infrarrojos. Un producto de apenas 12,99 euros que permite medir la temperatura de las personas sin necesidad de contacto. Es decir, evitando, al mismo tiempo, los contactos.
Un termómetro muy útil en tiempos de pandemia pero que después seguirá siendo muy valioso, ya que puede medir la temperatura del ambiente o de todo tipo de líquidos. Una joya que arrasa en Lidl a un precio inalcanzable por la competencia.
