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Cuerpos de seguridad endurecen filtros contra tatuajes nazis

Las fuerzas de seguridad rechazan a candidatos con tatuajes de ideología radical para mantener la neutralidad y valores democráticos

Los cuerpos de seguridad del Estado, incluyendo los Mossos d’Esquadra, la Guardia Civil y las Fuerzas Armadas, han intensificado los controles en sus procesos de selección para excluir a candidatos que presenten tatuajes de simbología ultra. El uso de tatuajes asociados con ideologías contrarias a los valores democráticos es motivo de exclusión inmediata, ya que estas marcas visibles representan un desafío a la neutralidad que deben mantener estos cuerpos. Aunque en las últimas décadas la normativa sobre tatuajes se ha flexibilizado, este cambio refleja un compromiso renovado con la integridad de las instituciones.

En el caso específico de los Mossos d’Esquadra, los aspirantes deben detallar y fotografiar cada uno de sus tatuajes. Durante el proceso de selección de 2021, por ejemplo, se excluyó a una candidata debido a un tatuaje asociado al grupo de ultraderecha Ultras Sur, a pesar de no ser visible. Las autoridades evaluaron que esta simbología vinculada a ideologías radicales era incompatible con la función que implica el puesto.

La implementación de estos controles estrictos subraya la importancia de evitar cualquier interpretación que pudiera generar conflicto con el respeto y la neutralidad institucional.

Protocolos en otras instituciones y su impacto en el proceso de selección

Este enfoque no es exclusivo de la policía catalana, sino que se extiende a otras instituciones como el Ejército español y la Guardia Civil. El Ministerio de Defensa también ha establecido desde 2021 protocolos para revisar y filtrar los tatuajes de los candidatos a las Fuerzas Armadas, excluyendo a algunos por llevar símbolos considerados incompatibles con los valores constitucionales. En la Guardia Civil, estos protocolos han existido desde hace tiempo, y ya en 2017 rechazaron a un candidato por portar tatuajes de simbología ultra.

Estos controles representan un equilibrio en la política de tatuajes, que ha pasado de ser estricta a más flexible, aunque se mantiene firme en casos donde los tatuajes sugieren posiciones radicales o discriminatorias. Al endurecer estos filtros, los cuerpos de seguridad buscan asegurar que sus miembros proyecten neutralidad y respeto hacia la sociedad a la que sirven, reforzando así la confianza pública en sus instituciones.

Un compromiso con la neutralidad y los valores constitucionales

La exclusión de candidatos con tatuajes de simbología ultra enfatiza el compromiso de los cuerpos de seguridad con la defensa de los derechos y la neutralidad. Este esfuerzo por controlar el tipo de simbología en sus filas ayuda a mantener la integridad y profesionalismo de las fuerzas de seguridad, asegurando que se alineen con los valores democráticos. Al adaptarse a los cambios de la sociedad, estas instituciones buscan proteger su imagen y fortalecer el respeto y confianza de la ciudadanía.

Este enfoque destaca la importancia de las políticas de selección en contextos donde la representación y la neutralidad son fundamentales. La medida busca proyectar un mensaje claro: los valores y principios democráticos son innegociables en los cuerpos de seguridad.

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